¿A quién no le apetece, en pleno verano cuando el sol más calienta, la sombra de una pérgola?
Una pérgola es una estructura arquitectónica que consta de columnas verticales que sostienen vigas horizontales y una cubierta abierta. Por lo general, se utiliza en jardines, patios o terrazas como una estructura para proporcionar sombra, crear un espacio al aire libre con estilo y definir áreas funcionales.
Las pérgolas se han utilizado a lo largo de la historia en diferentes culturas desde los antiguos jardines persas hasta los patios renacentistas europeos. Hoy en día, las pérgolas se han convertido en una opción popular para agregar un elemento decorativo y funcional a espacios al aire libre en casas, restaurantes, hoteles y otros lugares.
Las pérgolas pueden estar hechas de una amplia variedad de materiales, como madera, metal, vinilo o incluso materiales compuestos. La madera es uno de los materiales más comunes y tradicionales utilizados para construir pérgolas, y puede dar un aspecto rústico y natural. En mi caso la construiré de metal. El metal, como el hierro forjado, puede ofrecer un aspecto más moderno y resistente, no obstante el vinilo es una opción duradera y de bajo mantenimiento.
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Una de las características distintivas de una pérgola es su diseño abierto, que permite que la luz del sol y la brisa pasen a través de ella. Al tener la cubierta abierta permite la opción de plantar enredaderas o plantas trepadoras (en mi caso plantaré bachocones) alrededor de la estructura, los cuales proporcionarán la sombra necesaria creando una atmósfera verde y fresca.
Para la construcción de la misma he tenido en cuenta ciertas consideraciones, aunque algunas venían marcadas por la ubicación en el terreno donde se construirá.
El tamaño vendrá determinado por el espacio disponible y la cantidad de sombra que necesito.
Los materiales que utilizaré para la construcción de la misma serán metal y hormigón. En la construcción de la misma efectuaré mis primeros “pinitos” en el arte de la soldadura.
El diseño será el mismo que la que construía todos los años con cañas, y que siempre caía al suelo, al menos una vez, por causa del viento.
Al ubicarla en un sitio de paso, y como los bachocones ocupan un espacio importante del huerto, lograré dos beneficios, por una parte sombra y por otra la producción de bachocones anual. Me surge la duda si añadir, en cada costado de la pérgola, una planta de margaritas entre las dos plantas de bachocones de cada costado.
La adecuación del suministro de agua para el riego es esencial para el éxito de cualquier huerto y una vez que procedo con la construcción de la pérgola adecuaré, de paso, el suministro de agua para el riego del huerto. Al no ser muy experto en el arte de la soldadura me cuestiono si proceder a soldar la tubería de agua a la varilla que ejerce de sujeción de la pérgola o sujetarla a la misma con unas simples bridas de plástico o metálicas.
En mi caso utilizaré el riego manual este es el método más básico de riego y simplemente implica el uso de una manguera de jardín para aplicar agua directamente sobre el terreno donde están las plantas. Este método es muy adecuado para huertos pequeños o plantas individuales, pero puede ser menos eficiente en términos de uso del agua y mano de obra.
Es importante recordar que el surtido de agua adecuado dependerá de varios factores, como el tamaño y tipo de huerto, el tipo de suelo, las necesidades de agua de las plantas y el clima local. Así mismo deberemos de observar y evaluar, regularmente, las necesidades de agua de nuestras plantas y ajustar los métodos de riego en consecuencia para asegurarnos de que nuestras plantas reciban la cantidad adecuada de agua para un crecimiento saludable.
Frase del día:
“ Millones vieron caer la manzana, pero Newton fue el único que se preguntó por qué. ”
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