Agradable perfume, fruto grande, carnoso y de color amarillento.
El fruto del membrillo, como tal, no es famoso por comerlo en fresco, más bien se usa para compotas o mermeladas, añadiéndole azúcar, debido a su sabor fuerte, amargo y astringente.
A diferencia de las manzanas y las peras, la piel del membrillo se encuentra cubierta de un tomento, pelusa algodonosa que cubre la superficie de los órganos de algunas plantas, el cual se desprende en copos al rozarlo. También se desprende cuando, en otoño, el membrillo madura.
Pero, en esta entrada, lo que nos ocupa es la poda del membrillo y una de las razones más importantes para podar un membrillo es incentivar la producción del fruto.
Al efectuar la poda, los objetivos a alcanzar son:
· Controlar el desarrollo del árbol.
· Mejorar la cantidad y calidad de la cosecha.
· Favorecer la iluminación y aireación en la copa e interior del árbol.
· Eliminación de las ramas viejas, las cuales pueden albergar parásitos, así como también las secas, rotas o dañadas.
Para la correcta formación del árbol es necesario realizar algunas podas en el inicio, posteriormente, cuando el árbol está formado y se ha desarrollado, la poda deja de ser importante y suele efectuarse muy pocas veces y estas van encaminadas a la eliminación de ramas muertas, torcidas y aquellas que se dirigen al interior o se superpongan con otras.
Lo primero que tenemos que tener en cuenta a la hora de planificar la poda de membrillos, son las heladas y el período de menor actividad y crecimiento del árbol. Por lo general esta se suele realizar a principios de primavera, antes de que el árbol recupere su actividad. En el caso de climas cálidos la poda suele realizarse en el otoño
En la poda de formación, que se efectúa hasta el 3er año con el fin de establecer la estructura del árbol y dirigir su crecimiento, al ser una poda bastante drástica, se efectúa cuando el árbol esta en reposo, es decir en otoño o finales de invierno.
Para su realización procederemos de la siguiente forma:
· En el 1er año, se deben podar todas ramas del membrillo. Así, brotarán ramas más bajas.
· En el 2º año, se recortarán un poco las ramas principales, a 2/3 de su longitud. Las ramas que broten desde la mitad inferior del tronco las quitaremos y las demás las dejaremos.
· En el 3er año, podamos las ramas principales a 2/3 de longitud, y quitamos las ramas que vayan creciendo hacia dentro de la copa del árbol.
En la poda de fructificación, que se realiza en el 3er o 4º año del árbol, con el objetivo de establecer las ramas principales productivas, elegiremos las 3 o 4 ramas principales que queremos que sean la estructura del árbol. Estas ramas no deben tener demasiada inclinación, ya que así evitaremos que en el futuro se rompan por el peso.
A continuación, podaremos los chupones que salgan de estas ramas y las recortaremos un poco, dejando definida la estructura del árbol.
En la poda de producción, la cual se realiza a partir del 5º año, se efectúa para conservar su forma y despejar la parte interior del árbol, de esta manera aprovecharemos la cantidad de luz solar captada por la copa, con el fin de mejorar la calidad y cantidad de la cosecha.
Se trata de una limpieza y aclareo de las ramas, con el fin de facilitar la entrada de luz para beneficiar al fruto. En definitiva, lo que se busca con la poda de producción es mejorar el rendimiento del árbol y mejorar así su producción.
Para su realización procederemos de la siguiente forma:
· En primer lugar, eliminaremos los chupones más grandes, ya que son poco productivos y frenan el correcto desarrollo de la rama.
· Debemos cortar las ramas más bajas, ya que son las que reciben menos iluminación y, por lo tanto, producen los frutos de peor calidad.
· Es recomendable que la copa tenga una forma lobulada, con muchos entrantes y salientes para aumentar así la exposición y conseguir un mejor aprovechamiento de la luz solar. También podaremos las ramas entrelazadas del interior de la copa, así como aquellas que estén dañadas, rotas o enfermas.
· Los aclareos que realicemos no deberán de ser excesivamente intensos de ramas finas, para mantener la relación hoja/madera. Evitaremos así el exceso de madera, que reduce la capacidad de renovación de las ramas productivas.
Por lo tanto la poda de un membrillo maduro se hace para conservar su forma y despejar la parte interior del árbol. De esta forma, mejoramos la aireación y favorecemos la entrada de luz. Se denominan podas de producción, y durante esta fase también podemos realizar podas en verde y podas de rejuvenecimiento.
La poda de rejuvenecimiento, o poda de renovación, la cual se realiza en membrillos con más de 20 años, con indicios de envejecimiento, y después de haber estado produciendo muchos años. Estos síntomas pueden ser baja producción y de peor calidad, pérdida de follaje en el interior del árbol, hojas más pequeñas y de color amarillento,...
Se trata de una poda drástica, para rejuvenecer el membrillo, aunque también se puede hacer de forma progresiva.
· Poda drástica de rejuvenecimiento: En el primer caso lo que hacemos es eliminar todo el follaje del árbol, dejando prácticamente la base del tronco y las ramas principales para que vuelvan a crecer.
· Poda progresiva de rejuvenecimiento: Consiste en ir podando desde lo alto de la copa hasta la base de las ramas. Se hace por fases, cada 3 años iremos cortando una de las cuatro ramas principales del árbol.
La poda en verde del membrillo, generalmente la realizaremos en verano. Aunque se pueden realizar en cualquier época del año, lo normal es hacerlas a finales del mes de agosto, cuando el membrillo apenas tiene actividad a causa de las elevadas temperaturas.
Se efectúa para controlar el crecimiento de los chupones, eliminando los que no son aprovechables para el membrillo.
El momento ideal para la recolección de los frutos es unos dos meses antes de su maduración, en este momento, el fruto se caracteriza por un olor penetrante u unas pequeñas manchas amarillas en su corteza. Se almacena bien y puede durar hasta un poco más de tres meses, siempre y cuando se conserve adecuadamente.
Recolección de este año 2021.
Las frutas de membrillo saben mejor cuando se recolectan antes de que maduren completamente. Son altamente nutritivas, ricas en vitamina C y se pueden comer crudas, sus semillas también son comestibles. Las frutas maduras se pueden usar para hacer jugos, mermeladas o postres. Al igual que la fruta tropical popular se puede convertir en bebidas, mermeladas y otros alimentos.
Frase del día:
“ Los que renuncian son más numerosos que los que fracasan. ”
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