Noviembre es un mes que viene marcado por las lluvias
y el frío, además tenemos menos horas de luz. Una de las tareas más importante
va a ser la de proteger a las plantas de las primeras heladas y que puedan así
continuar desarrollándose. Esto lo podemos hacer con el acolchado
(en inglés mulching)
es un mantillo
o capa protectora que recubre la tierra.
El
mulching
o acolchado tiene multitud de beneficios: inhibe el crecimiento de hierbas no
deseadas (reduciendo considerablemente la carga de trabajo en la huerta),
aporta materia orgánica al suelo, retiene humedad en la tierra (reduciendo la
cantidad de agua necesaria para los riegos), protege a las raíces de cambios
bruscos de temperatura y protege a la tierra de la erosión.
Pero además es necesario conocer y aplicar otros
sistemas para proteger los cultivos frente a granizos, heladas y el viento.
Durante noviembre disminuiremos los riegos, aunque es importante estar pendiente y asegurarse de que los cultivos reciben el agua necesaria, ya que el tiempo puede ser inestable y puede no llover tanto como se podría esperar.
Es buen momento para sanear los bancales en los que
cultivaremos más adelante, cuando la tierra esté húmeda aprovecharemos para
airearla y descompactarla, sacar las adventicias y los restos de los cultivos
que hayan quedado del verano y que podemos usar como abono verde o
añadirlas al compost.
Pero retrocedamos un poco y hablemos de las plantas
adventicias, ya sabemos que estas
son muy poco conocidas con esta desinencia por muchos agricultores, no obstante
otra cosa es hablarles de malas hierbas, ¿pero resultan realmente malas
o perjudiciales estas plantas para el huerto?
El hombre, desde que conoció la forma de domesticar
las plantas y hacerse sedentario ha sentido repudio por las plantas salvajes o
nacidas de forma espontánea, por considerarlas totalmente competidoras
de aquellas que si les proporcionan un beneficio directo o producción. ¿Pero
son verdaderamente una competencia?
En la actualidad, son numerosas las publicaciones que
tras investigaciones evidencian que estas plantas puede resultar un verdadero beneficio
para nuestros cultivos y forman un rol importantísimo en el huerto ecológico,
de ahí la sustitución de la desinencia “malas hierbas” por adventicias (“que se
desarrolla en cualquier sitio”).
Si bien es cierto que estas plantas poseen un rápido
crecimiento y desarrollo reproductivo, gran adaptación a diferentes condiciones
edáficas y climatológicas ya sea para su germinación o crecimiento; en el
huerto reportan numerosas ventajas como las que a continuación se detallan.
- Mejoran la calidad del suelo. Aportan materia orgánica (de forma fortuita) y evitan que la radiación solar intensa y directa dañe su estructura al destruir el humus y los microorganismos.
- Constituyen una cubierta vegetal que controla la erosión del suelo.
- Algunas de ellas son leguminosas que fijan el nitrógeno atmosférico.
- Protegen de las heladas ya que cubren el suelo.
- Son una fuente de recursos genéticos y biodiversidad.
- Sirven de indicadoras visuales del tipo de suelo. Ej.: si aparecen ortigas nos indica suelo es rico en nitrógeno.
- La presencia de una hierba adventicia puede impedir la presencia de otra planta que ofrece peores efectos.
- Estas plantas pueden incluso producir algún producto útil en alguna fase de su desarrollo comestible para el hombre o el ganado; o bien pueden en algunas ocasiones como plantas medicinales, las cuales podemos recolectar en nuestro propio campo de cultivo o huerto.
- Pueden usarse como colaboradoras de nuestra explotación actuando como mejorantes.
En noviembre intentamos no sembrar ni trasplantar
en los días más fríos, porque las plantas son todavía muy pequeñas y
vulnerables, pudiendo sufrir daños por las heladas.
Durante noviembre podemos sembrar:
- Escarola.
- Coles.
- Habas.
- Ajos.
- Guisantes.
- Cilantro.
- Puerros.
- Espinacas.
- Lechuga.
- Berza.
- Apio.
- Coliflor.
- Rábanos.
- Rúcula.
- Borraja
Una de las ventajas de esta
época de invierno es la desaparición casi en su totalidad de Plagas que
puedan atacar a nuestros cultivos. Debemos de tener en cuenta que cuanta mayor
diversidad de hortalizas, medicinales y aromáticas tengamos en nuestro huerto,
más posibilidades tenemos de evitar plagas, ya que, creamos un ecosistema que
se autoregula.
Aunque la mayoría de las plagas no nos debe
preocupar, debemos prestar especial atención a la oruga de la col y a
hongos como el mildiu o el oídio que proliferan fácilmente cuando hay humedad y
temperaturas suaves.
Frase del día:
" El conocimiento de nadie puede ir más allá de su experiencia." John Locke (1632 - 1704) Filósofo y médico inglés.