¿Te animas a tener tu propia platanera?
Yo ya me he decidido, hace unos días le regaló, un compañero de trabajo,
un retoño de platanero a mi esposa, y ya le he buscado ubicación en el huerto,
protegido de las corrientes de aire y con una muy buena exposición a los rayos
de sol.
Aunque el platanero se considera una planta de los trópicos y
subtrópicos, tener un platanero se ha ido haciendo cada vez más fácil. Son
plantas muy decorativas, y se puede elegir entre varias especies, comestibles o
no. Suelen ser fáciles de mantener y no requieren demasiada experiencia. Cada especie de
platanero tiene características específicas, y algunas alcanzan una altura de
hasta 6 metros.
(A la izquierda estado del platanero en su plantación, 8 de Agosto, a la derecha estado del mismo el día 26 de Agosto)
El mayor trabajo, a la hora del mantenimiento
de los plataneros consiste en la eliminación de vegetación y el apuntalamiento
de la planta para contrarrestar el torcimiento por el peso de la fruta. El
proceso de producción convencional, y no usar pesticidas, consiste en cubrir
los racimos de plátanos con bolsas de polietileno para protegerlos del viento,
de los ataques de insectos y pájaros además de para mantener la temperatura
óptima.
El platanero pertenece al género Musa de la
familia de las musáceas, el platanero suele ser cultivado por su fruto, el
plátano ó banana, pero cada vez más personas se sientan atraídas por sus
virtudes decorativas.
El plátano
no es un árbol, es una planta herbácea perenne gigante, con rizoma corto y
tallo aparente. Su tronco es una superposición de hojas.
Para conocer mejor a esta planta, su tallo es
en realidad casi subterráneo con un aspecto de tipo rizoma o bulbo. De él
aparecen numerosos puntos de crecimiento que dan origen a pseudotallos, raíces
y yemas vegetativas. Por ello, el platanero es una planta que rebrota con mucha
facilidad desde su base.
Los troncos del platanero se forman
con los tallos de las hojas envueltas una alrededor de la otra. Las hojas
nuevas empiezan a crecer en el interior, debajo de la tierra. Que empuja hacia
arriba por el centro y salen del centro de la corona. También lo hace la flor,
que finalmente se convierte en un racimo de plátanos.
Una planta de platanero tarda de 9 a 12 meses para crecer y
producir un racimo de plátanos. Entonces la planta madre muere. Pero alrededor
de la base surgen muchos retoños pequeños que la sustituirán.
Las
plantas de plátano no producen semillas. Su reproducción es mediante el bulbo o rizoma. La
flor aparece en el sexto o séptimo mes. Los plátanos se cosechan durante todo
el año, no teniendo una temporada de crecimiento.
La
siembra del plátano se puede realizar durante todo el
año la planta deberá estar ubicada a pleno sol, es altamente recomendable plantar los plataneros
en un lugar protegido del viento y, como dato orientativo, recibir riegos cada
dos o tres días si está en tierra o cada semana si está en maceta. Hay que
mantener la tierra o el sustrato húmedo, pero no encharcado. La frecuencia de
riegos variará según la climatología de la zona.
No es imprescindible el abonado, pero si se quiere abonar utilizaremos cualquiera que sea ecológico. Es muy importante
seguir las recomendaciones del fabricante.
Los plataneros pueden soportar el calor extremo (si tienen suficiente agua), pero esta no le gusta en demasía.
Pueden soportar el clima frío por un tiempo corto, pero esto no es muy de su
agrado. Por debajo de 14 ° C (57F) simplemente dejan de crecer.
Si la temperatura baja, en
exceso, la piel se vuelve gris y las hojas se tornan amarillas. Una helada mata
la planta sobre el suelo, pero el “cormo” puede sobrevivir y puede volver a
crecer.
El rango de temperatura ideal
para el cultivo del plátano suele oscilar entre 26 y 30 °C (78-86F).
Durante los primeros días de la plantación, la tierra ha de
permanecer húmeda, pero no encharcada, ya que por este motivo las raíces pueden
pudrirse (no es necesaria tanta agua ya que no tienen esas inmensas hojas que
produce la evaporación del agua, por lo que no necesitaran esa cantidad de agua
que requerirán de mayores.)
La causa más común de muerte para el platanero es la falta de
agua. La causa más común para no conseguir la fruta es el hambre (falta de
nutrientes). Aparte de que los plátanos no necesitan mucho mantenimiento,
basta con retirar las hojas muertas y cortar las plantas muertas de vez en
cuando, como ya he dicho anteriormente.
Se hace necesario retirar todos los retoños para que los frutos
se hagan más grandes, únicamente se ha de mantener el hijo, que será el
encargado de la continuación de la planta una vez que la madre haya dado ya su
fruto.
En la imagen superior se puede apreciar todo el ciclo de la planta platanera, en la que la flecha roja sería el hijo o retoño, la flecha marrón sería la madre, que acaba de dar su fruto y ya está cortada y la flecha rojo oscuro sería la abuela, cortada el año anterior.
Los mejores retoños son los que tienen las hojas pequeñas, con
forma de lanza, no con las hojas grandes y redondas. Esto es un síntoma de que
a la madre le faltaban nutrientes.
Dependiendo de la altura de la planta a la hora de su
plantación, observaremos que en unos 6 o 9 meses aparece la primera flor. Trataremos
de dejar las hojas a su alrededor en especial la protección de la parte superior
curva del tallo, para evitar las quemaduras de sol.
En su estado adulto se produce la floración,
un escapo pubescente terminado por un racimo colgante de 1 a 2 metros de largo
por planta. Cada uno, dependiendo de la variedad y vigor de la planta, posee una
veintena de brácteas ovales alargadas, agudas, de color rojo púrpura, cubiertas
de un polvillo blanco harinoso. De sus axilas nacen a su vez las flores. Si el
clima no es muy cálido, este racimo suele ser muy pequeño.
Sus flores son amarillentas, irregulares y
con seis estambres y tres pistilos con ovario ínfero. Una vez fecundadas se
producen los racimos, que en condiciones apropiadas pueden llevar hasta 20 “manos” (grupos de plátanos),
en climas más fríos pueden ser menos de la mitad.
El fruto del plátano
es técnicamente una baya oblonga. Su color es amarillo verdoso, amarillo,
amarillo-rojizo o rojo según la variedad y estado de maduración. Los plátanos
desarrollan una masa de pulpa comestible sin ser necesaria la polinización.
Después de nueve meses, se cosechan
los plátanos cuando aun están verdes.
A la hora de la recolección
procederemos de la siguiente manera:
·
Corta una
hendidura en la mitad del árbol, al lado opuesto del racimo.
·
Deja que el
árbol se doble cuidadosamente y corta el racimo.
·
Los frutos
madurarán rápido después de cosecharlos; por ello, es mejor que recolectes
algunos antes de la cosecha, para que no tengas una cantidad excesiva de frutos
que se desperdiciarán.
·
Corta el tallo del árbol y prepara el próximo retoño.
· Retira la
mitad superior del tallo del platanero después de recolectar los frutos.
· Retira los
retoños de la base usando el mismo proceso que usaste para el cuidado de tu
planta.
·
Recuerda
dejar un retoño para reemplazar la planta madre que ahora está muriendo.
Muchos jugadores de tenis saben que los
plátanos o bananas son una comida rápida que es realmente muy buena para la
salud. Los comen entre sets para obtener una rápida, pero sostenida, ráfaga de
energía. Los plátanos son ricos en hidratos de carbono, potasio y vitaminas,
como las vitaminas A, C y B6. Son una buena fuente de fibra para la dieta y no
contienen grasas.
Frase del día:
" Nuestra vida siempre expresa el resultado de nuestros pensamientos dominantes." Soren kierkegaard (1813 - 1855) filósofo y teólogo danés.